Tijuana NO! en Monterrey

LA CIUDAD

Mi visita a la hermana ciudad de Monterrey fue mucho mas que encantadora en varios sentidos, además de ser la primera vez que iba a la ciudad, por ser artista me tocaba conocerla, interactuar y disfrutar de su vida y comida sin costo alguno, lo cual ya era una importante consideración para no solo tener la disposición total para verme absorbido por dicha ciudad, sino que también me brindaba la oportunidad de disfrutarla con alcances extraordinarios. Mi sorpresa (que mas que advertido estaba) fue la de toparme con una ciudad perteneciente a la organización de los Estados Unidos Mexicanos, limpia, organizada en todos los sentidos, con buen diseño en absolutamente todas partes (por lo menos todo cuanto pude absorber en un par de días), buen servicio, buena comida, buen público, buena vibra, y podría seguirme con muchas cosas mas. Fue un placer encontrar un lugar en donde la constante sea hacer las cosas bien, una ciudad donde lo propio es cuidar los detalles. Su color, su gente, sus símbolos comerciales, su comida y hasta su acento es sumamente particular. En mi fugaz recorrido por Monterrey me toco comer pizza, tocar en el Iguana, ir a MARCO, desayunar en las monjas, comerme unos hot-dogs manchadísimos, dar la vuelta por el barrio antiguo y deleitarme con la súper belleza de las regias que todas salen súper arregladas vayan a donde vayan así como con la vestimenta de dos tres cholos, su apariencia y su slang. Tras poco menos de dos días en Monterrey me sentí completamente absorbido totalmente por la calle diseño, fiesta y noche de Monterrey.

EL CONCIERTO

Me contaron que la última vez que Tijuana No! piso Monterrey fue hace como 10 años en un festival en el que Luis Güereña acabó provocando a Enrique Bumbury de los Héroes del Silencio en pleno show por que el grupo de Bumbury utilizo su fuerza de grupo extranjero para utilizar injustamente el horario de Tijuana No! Creo que fue un verdadero show, intervino la policía, Tijuana No! se quemó con los promotores y desde entonces se veto al grupo hasta esta ocasión. Este show fue en el “Café Iguana”, para quienes no lo conocen es un lugar bastante representativo de Monterrey a nivel musical, ubicado en el barrio antiguo y de dimensiones enormes, con cuartos y cuartos, terrazas, esculturas, peceras, sala de conciertos y mas. Dentro de los halagos a la ciudad, me pusieron para tocar un Fender Rhodes hermoso y un Roland Phantom de su mejor serie, una razón mas para celebrar lo bien que se hace todo en Monterrey (o lo bien que por lo menos me toco a mi). Como músico invitado de lujo estaba Jorge, cantante de Sekta Core, Mayumi en la voz y los metales del grupo Folk Safari. El show y todo lo que redondeo el espectáculo estuvo buenísimo, muy dinámico, con la parte rítmica del grupo impecable, mostrándolo sumamente solido. Un show que redondeo un excelente año en México para Tijuana No!

Luego del show, una vuelta por las calles del centro de cualquier ciudad es casi siempre una gran opción y luego de la caminada y a un par de cuadras del hotel, esta el Museo de Arte Contemporáneo de Monterrey (MARCO), me sentí sumamente alegre de poder disfrutar de exposiciones sumamente inquietantes en un museo en el que sus dimensiones de monumento contemporáneo afectan por completo la percepción y la comunicación entre lo expuesto y el público. También me sentí sumamente afectado de principio a fin por la torre de Luis Barragán, una escultura gigante que no es más que una bloque monumental, vertical, permeada por el color anaranjado, que proyecta el poderío de una ciudad en la que el comercio tiene un papel determinante en la vida de todos sus habitantes. Terminar de ser absorbido por la calle, echar el taco final se convirtió en la despedida perfecta de la ciudad. Espero volver por cualquier pretexto pronto muy pronto a Monterrey.

Fotos 1-17 Dardin Coria, 18-22 Saulo Cisneros